Como si de una paradoja siniestra se tratase, el día en que cierra la última mina de interior del Bierzo, el Ministerio para la Transición Ecológica publica en el BOE las instrucciones complementarias de seguridad para minas subterráneas de carbón con riesgo de explosión. En esa normativa, que ya no será de aplicación en el Bierzo, se marcan las cantidades máximas de concentración de gases inflamables y tóxicos en el interior de las minas, así como las obligaciones de prevención y de evacuación de los empresarios. También establece cuáles han de ser los protocolos médicos con los que deben evaluar a los trabajadores.
En la provincia de León, si no cambian las cosas, solo tendrá aplicación en la mina La Escondida de Laciana, además de las minas asturianas que sobrevivan al plan de transición Justa del Gobierno pero, como decimos, estas medidas de protección ya no ampararán a los mineros del Bierzo.